Cuando llego a Baños
ya siento que es un lugar especial...de esos en los que podría
vivir. Es un pueblecito pequeño, ubicado en un valle y rodeado de
altas montañas con mucha vegetación. Además desde aquí, puedes
hacer casi todos los deportes de aventura que te apetezcan:
barranquismo, rafting, canopy, puenting....
Tiene un centro muy
animado y lleno de tiendas que ofrecen "melcocha", un
caramelo blando de diferentes sabores y que los vendedores van
estirando para que no se ponga duro.
Baños está rodeado de
agua. Tiene la ruta de las cascadas, que se pueden hacer en bici,
pero como no me hace demasiado buen tiempo, prefiero hacerlo en bus.
Se pasa por unas 5 cascadas, hasta llegar a la última y más
apoteósica el Palión del Diablo.
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| Se puede pasar en una cesta que se llaman "Tarabitas" |
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| El Palíón del Diablo! |
Y para cuando uno se
quiere relajar, Baños cuenta con unos baños termales con agua
caliente de hasta 45º (al principio duele, pero después le vas
pillando el gustillo)!! Son unas termas donde se mezclan los
turistas con los locales y abren desde las 5h de la mañana hasta las
22h. Gracias a la recomendación de los chicos del “Hostel La Casa
del Molino Blanco” (uno de los mejores en estos 5 meses) me quité
la pereza, y a las 6h estaba dándome un bañito en las aguas con
azufre.
Además, hay un par de
caminatas que ofrecen una buena vista de Baños. Una lleva hasta la
Casa del Árbol, desde donde el Sr. Carlos, vigila al volcán
Tungurahua, que esa mañana rugió unas tres veces. Y, por una
propinilla, te deja subir al Columpio del Cielo
(I-M-P-R-E-S-I-O-N-A-N-T-E)!!
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| Papá, Mamá...la foto es un montaje...jajaja! |
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